- Título: Adiós, señor Chips
- Autor/a: James Hilton
- Traducción: Concha Cardeñoso
- Ilustración: Jordi Vila Delclòs
- Editorial: Trotalibros
- Páginas: 114
- Año de edición: 2021
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Sinopsis: El viejo señor Chipping ha sido el profesor de griego y latín en la escuela de secundaria Brookfield desde tiempos inmemoriales. Nadie recuerda cuándo llegó, ni cómo era de joven, ni si alguna vez se casó, pero su sentido del humor, su talante convencional, su característica forma de hablar y las anécdotas que ha protagonizado lo han convertido en un emblema de la institución y en una figura muy querida por alumnos, exalumnos y profesores. Esta es la historia de su vida.
«Adiós señor chips» es la novedad más reciente de Trotalibros Editorial, traducida por Concha Cardeñoso e ilustrada por el fantástico Jordi Vila Delclòs. La editorial Trotalibros está fundada por el booktuber Jan de Trotalibros, y está recuperando clásicos injustamente descatalogados (como “El palacio de hielo”, que también reseñé en el blog).
Viena Ediciones publicó “Passi-ho bé, senyor Chips” en catalán en 2012, pero en castellano no se había vuelto a editar desde 1940 (!!). Esta novela de James Hilton está considerada el clásico inglés sobre la vida escolar. Ha emocionado a miles de lectores durante décadas y fue adaptada más de una vez a la gran pantalla, incluso en formato musical.
«Adiós, señor Chips» gira alrededor del señor Chipping, el profesor de griego y latín de la escuela de secundaria de Bookfield desde tiempos inmemoriales. Según explica Jan Arimany en la «Nota del editor»: «James Hilton era hijo de John Hilton, el director de la Chapel End School, en Walthamstow [Inglaterra], por lo que desde pequeño estuvo muy familiarizado con la docencia. De hecho, Hilton se inspiró en la figura de su padre y en la de W. H. Balgarnia, su profesor, para crear al inmortal señor Chipping, el protagonista indiscutible de esta breve novela. El gran éxito de Hilton fue crear un personaje que es entrañable y humano a la vez. »
¡No podría estar más de acuerdo! El señor Chipping me ha parecido un personaje inolvidable, tanto por sus peculiaridades, como por su tolerancia, humildad, perseverancia y sentido del humor. Con una agilidad increíble, James Hilton nos hace saltar del presente al pasado para mostrarnos la vida de este profesor único, una persona con unos valores tan sólidos que ni siquiera la guerra consigue cambiar. Aunque sus compañeros a menudo piensen que sus ingeniosos comentarios son excentricidades inofensivas, el señor Chipping no se corta un pelo a la hora de decir verdades como puños.
p.86 «Señora Wickett, ha venido el joven Gregson…, hum…, se acuerda de él, ¿no? Un chico alto, con gafas. Siempre se retrasaba. Hum. Ahora trabaja en…, hum…, la Liga de las Naciones, donde supongo que…, hum…, sus retrasos pasarán… completamente desapercibidos, ¿no le parece?»
Eso sí, mi personaje preferido ha sido Katherine. ¡Qué chica más fascinante! No diré nada más para no haceros spoiler, pero me hubiera gustado que Hilton le dedicara una novela a ella sola.
Reconozco que la lectura de este libro me ha parecido injusta… porque ¡se ha terminado mucho antes de lo que esperaba! Los capítulos se leen en un suspiro, pero nos acompañan mucho tiempo después de haberlo hecho. El estilo de Hilton es cercano, irónico, y con muy pocas palabras consigue crear imágenes que te envuelven por completo.
p.15 «Brookfield se encontraba al otro lado de la carretera, detrás de una muralla de olmos añosos, rojizos bajo el manto otoñal de las trepadoras. […] Como decía Wetherby, Brookfiled era una institución antigua, fundada durante el reinado de Isabel como centro de enseñanza secundaria que, con un poco de suerte, podría haberse hecho tan famosa como Harrow. […] Con todo, era un buen colegio de segunda fila. Contaba con el respaldo de varias familias importantes; había dado varios ejemplares de hombres de los que marcan la historia, cada cual en su época: jueces, miembros del Parlamento, administradores coloniales y algunos obispos.
Aunque su producción más representativa era de comerciantes, fabricantes y profesionales. Era una clase de colegio que, cuando salía en las conversaciones, obligaba a los esnobs a confesar que creían haber oído hablar de esa institución.»
«Adiós, señor Chips» es una oda a todos aquellos profesores que nos han marcado, aquellos que aman su vocación y consiguen inspirar a nuevas generaciones. Os hará reír, y es probable que os robe alguna lágrima, pero está claro que la historia y las ideales ilustraciones de Jordi Vila Delclòs se guardarán un lugar en vuestro corazón lector.
Mx